De los USA nos llegan dos novedades, la comedia romántica Un desastre es para siempre, con la típica pareja que descubre tras una noche loca en Las Vegas que son marido y mujer, y la más prometedora No hables con extraños, remake de la cinta de terror danesa del mismo título, ahora con James McAvoy recuperando su faceta más aterradora, aquella que vimos en Múltiple y Glass de Shyamalan, y con Mackenzie Davis como víctima en esta historia donde una pareja acepta la invitación de una familia a la que conoce en vacaciones... y todo se va complicando.
Tres son las propuestas de la incombustible factoría gala, y todas con la mujer en el centro. El teorema de Marguerite nos muestra a una brillante matemática, la única mujer de su promoción, que tras un grave error debe partir de cero. Algo similar le ocurre a la protagonista de Té negro, que en el último momento dice no en el altar y cambia Costa de Marfil por China, donde se pone a trabajar en una boutique de té ¿? Por último, Sidonie en Japón es la que tiene mejor pinta, aunque sea por conceder todo el protagonismo a Isabelle Huppert como una escritora de promoción por Japón, entre su editor y el fantasma de su marido.
Y acabamos en casa, con hasta cinco propuestas, aunque la mayoría de estrenos en muy pocas salas. Es el caso de Os reviento, con el clásico preso, exboxeador en este caso, que tras salir de la cárcel busca una vida tranquila pero acaba atrapado por su pasado, que aquí parece girar hacia el género de acción.
La hojarasca es un proyecto personal de Macu Machin, cuyas tías y madre protagonizan un film a medio camino del documental, en el que dos hermanas vuelven a la casa familiar 20 años después para el reparto de la herencia paterna, reencontrándose con la tercera hermana.
Y en L'àvia i el foraster el valenciano Sergi Miralles debuta en el largo con Carles Francino y la historia de la costurera del pueblo, que inicia una colaboración con el pakistaní de la frutería, que en su país era sastre. Colaboración a escondidas por el qué dirán, hasta que ella fallece y su nieto regresa de Manchester en plena crisis vital.
Saltamos a las películas que cuentan con mayor promoción y copias, empezando por la comedia Hotel Bitcoin, que reúne a rostros populares como Alejo Sauras, Marta Hazas, Canco Rodríguez o Pablo Chiapella en la historia de cuatro amigos que deben proteger 5.000 bitcoins en un hotel durante un fin de semana.
Y acabamos con la ganadora a los puntos, Justicia artificial, que cuenta con Verónica Echegui y Alberto Amman como protagonistas y toma la forma de thriller para reflexionar sobre un posible futuro uso de la Inteligencia Artificial en la justicia. Aquí proponen que la IA sustituya a los jueces --en pleno debate sobre el papel de los mismos en nuestro país-- para lograr una justicia imparcial, aunque por supuesto hay conspiración de por medio. Tiene más pinta de thriller comercial de temática oportunista, pero reflexiones como las que ya propuso Minority report (2002) nunca están de más, y si funciona como thriller, pues ya tendrá su punto.
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