Empezamos, pues, por el producto nacional, que muy atento a los reestrenos por los Goya llega sin grandes alardes. Así, solo tenemos la cinta catalana Les dues nits d'ahir, con el ya clásico argumento en el que tres jóvenes inician un viaje para lanzar las cenizas de un amigo que acaba de fallecer, y Los inocentes, que se inscribe en la línea de la serie Antidisturbios, aquí con la muerte de un policía de una pedrada durante el desalojo de un local social.
De los USA nos llegan otras dos novedades bien diferentes: Minari. Historia de mi familia, sobre las vivencias de una familia de emigrantes surcoreanos en los Estados Unidos de Reagan, y el que podría haber sido perfectamente el estreno de la semana, Relic, una de las triunfadoras del último festival de Sitges, cinta de terror que juega con la duda de si realmente hay un hecho sobrenatural o son solo los efectos del Alzheimer, protagonizada por un trío de actrices de tres generaciones con Emily Mortimer como rostro más reconocible.
Pero nos quedamos con el producto francés, que también viene por partida doble. De un lado, el documental Una niña, muy oportuno, que nos muestra un año en la vida de una niña trans de siete años. Y por otro, Solo las bestias, thriller en coproducción con Alemania que nos traslada a un pueblo en las montañas donde una mujer desaparece en plena tormenta de nieve y cinco desconocidos se ven envueltos en el misterio. Igual es el cartel, el argumento, o que el otro día revisé Smila. Misterio en la nieve y me he quedado con más ganas de nieve...
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