domingo, 21 de abril de 2024

El estreno: 'Civil War': ¿Un futuro improbable?


Nueva semana con varios estrenos potentes, aunque no de esos que rompen taquillas.

Empezamos en casa con ración doble, la coproducción de animación con China Guardiana de dragones, y una propuesta arriesgada, Hate songs, donde dos actores ruandeses y un técnico belga se reúnen en una emisora clave en el genocidio ruandés de 1994 para ensayar una ficción sonora que ayude a cerrar la herida, para descubrir pronto que sigue bien abierta.

Precisamente de Bélgica nos llega La chica que sanaba, lo nuevo de la cineasta Fien Troch, que tras Close nos presenta la historia de una joven que parece tener visiones premonitorias.

De ahí nos vamos a Francia, que nos trae dos de las cintas más interesantes de la semana. Por un lado, el que ha estado a punto de ser el estreno de la semana, El consentimiento, película en la que Vanessa Filho adapta la novela autobiográfica de Vanessa Springora en la que esta contaba como fue seducida a los 14 años por un hombre que entonces contaba 50, el prestigioso escritor Gabriel Matzneff, revelándole como un depredador sexual.

La otra propuesta gala no le va a la zaga, ya que en Rosalie la directora Stéphanie di Giusto cuenta la historia de una mujer barbuda en el siglo XIX, centrándose en la relación con su marido, quien descubre la condición de su esposa tras la boda, y en cómo ella acaba tomando las riendas de la situación, en una muestra de empoderamiento muy actual. Destacan las interpretaciones de Nadia Tereszkiewicz y Benoit Magimel, este último en racha ya que viene de otro dramón romántico de altura, A fuego lento con Juliette Binoche.

Acabamos en los USA, donde para empezar, tenemos Abigail, cinta de terror con una vuelta de tuerca a un argumento clásico: una banda de secuestradores ha raptado a la hija de 12 años de un capo y solo tienen que retenerla una noche a la espera del rescate... solo que la niña es una vampira.

Pero me quedo con Civil War, lo nuevo del siempre interesante Alex Garland en su doble faceta como director y guionista, habitualmente vinculado a la ciencia ficción, aunque esta vez con una premisa que podría dejar de serlo antes de lo que pensamos (pero vamos a cruzar los dedos para que no llegue la sangre al río): una guerra civil en los USA, algo por lo que Putin y Trump vienen trabajando desde hace ya unos cuantos años, y que ya mostró con gran acierto Homeland en sus temporadas finales. Con un reparto que incluye a Kirsten Dunst y Jesse Plemons en un combo ya habitual, además de Wagner Moura o Cailee Spaeny, la cinta nos muestra cómo tres fotoperiodistas tratan de llegar a Washington mientras el ejército rebelde se dirige a asaltar la Casa Blanca en medio de un panorama que recuerda mucho a la invasión de Ucrania. Quizás la película más oportuna ahora mismo.

sábado, 13 de abril de 2024

El estreno: Zambrano da el salto


El cine español empieza a encadenar títulos prometedores en una cartelera donde las mujeres siguen teniendo mucho que decir.

Es el caso de Sangre en los labios, una de las cintas que nos llegan de Reino Unido, siempre en coproducción, en este caso con los USA, donde Kristen Stewart vuelve a demostrar que le gusta arriesgar, aquí con una película de acción sin frenos que es también una historia de amor lésbico ambientada en el mundo del culturismo, con Rose Glass como guionista y directora, y un Ed Harris también pasado de vueltas sumándose a la causa.

Los otros dos films que presenta Reino Unido vienen más bien de la India, y no pueden ser más distintos: Monkey Man es el debut en la dirección del actor Dev Patel, que también protagoniza esta brutal cinta de acción producida por Jordan Peele, mientras que en El milagro de la Madre Teresa seguimos a una joven británica de origen hindú que descubre la figura de la religiosa.

En Francia, además de La segunda vuelta, que se suma al género de películas ambientadas en campaña política, en este caso con una periodista que trata de descubrir los secretos de un candidato, tenemos HLM Pussy, donde la guionista y directora marroquí Nora El Hourch toma como referente los abusos sexuales que ella misma sufrió para contar la historia de tres jóvenes que hacen frente a su agresor.

Ya en casa, Menudas piezas es la nueva comedia que aspira a romper la taquilla, con Alexandra Jiménez como mujer de éxito caída en desgracia que tiene que reeducar a jóvenes con problemas y acaba encontrando la solución en el ajedrez, en lo que parece estar basado en una historia real.

Pero me quedo con la otra opción española, El salto, lo nuevo de un Benito Zambrano que ya dejó patente su calidad en obras como Solas, La voz dormida o la más reciente Intemperie. Ahora narra, precisamente, el salto de la valla de Melilla, acercándonos a los motivos que llevan a los inmigrantes a jugarse la vida en busca de un futuro.

sábado, 6 de abril de 2024

El estreno: Dos 'pájaros' en la carretera


La cartelera empieza a animarse una vez pasadas las Pascuas, y lo hace con propuestas de todos los colores.

De los USA, por ejemplo, nos llegan dos cintas de género, como es habitual en Hollywood, por un lado la comedia de acción Freelance, que trata de aprovechar el buen momento de John Cena, bien acompañado por Alice Eve o Alison Bree, y por otro el film de terror La primera profecía, innecesaria precuela de La profecía de 1976 con Gregory Peck y Lee Remick. Al menos aquí encontramos a los veteranos Bill Nighy y Sonia Braga.

La gira internacional empieza, cómo no, en Francia, con Mi camino interior, road movie a mayor gloria del oscarizado Jean Dujardin, en el papel de un escritor que tras despertar de un coma empieza un viaje a pie  por toda Francia. De ahí nos vamos a Reino Unido con Pequeñas cartas indiscretas, duelo de altura entre Olivia Colman y Jessie Buckley ambientado en un pequeño pueblo donde las beatas empiezan a recibir cartas obscenas y las sospechas recaen en una joven madre soltera que ve peligrar la custodia de su hija. Y acabamos en Islandia con la curiosidad de la semana, Mayday Club, donde varias personas afrontan su miedo a volar y acaban perdidas en Islandia.

Vamos ya con las novedades nacionales, que son unas cuantas, empezando por el documental Mis ganas ganan, que recuerda cómo Elena Huelva revolucionó las redes sociales con su lucha contra el cáncer, y siguiendo con Animal/Humano, curioso experimento que sigue a un novillero y a un novillo en su camino a la plaza de toros. Completa este trío de propuestas alternativas La función, donde el director y guionista José Gasset combina realidad y ficción.

Acabamos con los dos estrenos españoles dirigidos al público mayoritario. Este es el caso especialmente de Matusalén, nuevo vehículo de lucimiento del cómico Julián López --por supuesto secundado por Raúl Cimas y Carlos Areces-- sobre el clásico adolescente eterno, en este caso un rapero de 44 años que por una apuesta con su padre se matricula en la universidad y deberá dejar el rap si no las aprueba todas.

Pero me quedo con lo nuevo tras las cámaras del también actor valenciano Pau Durà, que en Pájaros ha fichado nada más y nada menos que a Javier Gutiérrez y Luis Zahera --mejor actor en Málaga-- para una road movie a medio camino entre el drama y la comedia, en la que uno de los protagonistas contrata al otro para llevarle a la Costa Brava a ver pájaros, pero el cambio de rumbo de las aves les lleva a cruzar media Europa. Parece que el cine español sigue dando grandes títulos.  

jueves, 4 de abril de 2024

Justified / Bosch: Dos caras de la ley


 

En 2010 en FX y en 2022 en una Amazon que daba los primeros pasos en las plataformas audiovisuales arrancaron  sendas series que partían de la misma premisa: un policía mata a un delincuente en acto de servicio. A partir de ahí, dos producciones diferentes, pero ambas con sello propio.

La más antigua era Justified, cuyo título alude a que la muerte del primer delincuente estaba justificada. Aquí sí hablamos realmente de un policía de gatillo fácil, un tal Raylan Givens, que si bien vive en nuestros días, viste como un cowboy y se comporta como tal, de ahí el subtítulo de la serie, La ley de Raylan. A ello se suma el escenario, Kentucky, a donde es enviado Raylan como castigo, esa América profunda de paletos que se acuestan con sus primas, por acudir al cliché, que remacha el ambiente de western.

La otra serie, Bosch, está protagonizada por Harry Bosch, un policía de Homicidios en Hollywood que vive en un lujoso ático con vistas increíbles. Más serio e introspectivo, también es de los que van a la suya, aunque eso implique darle un puñetazo a algún superior. Lo de llevarse mal con los jefes también se le da bien a Raylan, que como Bosch tiene ciertos traumas relacionados con sus progenitores, en su caso un padre al otro lado de la ley, en el de Bosch la trágica muerte de su madre, de la que no desvelaremos más, unido a su posterior paso por el orfanato. Vamos, que ninguno tuvo una infancia feliz, y a ello Bosch suma que tampoco se le da bien ser padre con una hija que vive en California.


Ambas series parten de unos cimientos sólidos en forma literaria. Raylan es un personaje surgido de la pluma de Elmore Leonard, uno de los mejores autores contemporáneos de novela negra norteamericana, a quien podríamos emparentar por algunas de sus características con el estilo Tarantino, de hecho el director adaptó una de sus novelas, Jackie Brown, en la que me sigue pareciendo su película más redonda.

Bosch, a su vez, protagoniza una larga serie de novelas de Michael Connelly, que al igual que Leonard figura como productor de su adaptación televisiva.

Y ambos personajes encontraron al actor perfecto para encarnarlos. En el caso de Raylan, Timothy Oliphant, que acababa de ver cancelada la magistral Deadwood y encontró la excusa para seguir poniéndose el sombrero de vaquero, aunque su personaje aquí es más descarado y más imperfecto que el insobornable sheriff de Deadwood.

Curiosamente, también procede de Deadwood –aunque esto se puede decir de casi cualquier serie o película actual—el intérprete que da vida a Bosch, Titus Welliver, que encontró por fin un papel protagonista en el que brillar tras un sinfín de secundarios.


Entre las diferencias también encontramos que, mientras Justified es un procedimental al uso, con una trama autoconclusiva en la mayoría de episodios, además de la que da cohesión a toda la temporada y que es la que tiene un mayor tono de western, Bosch cuenta con una sola trama lineal, o mejo dicho, varias, ya que su primera temporada adapta hasta tres novelas: Cementerio de huesos, Echo Park y Una rubia de hormigón, combinando sus tramas, especialmente las de las dos primeras.

Por lo que respecta a la conclusión de sus primera tanda de episodios, Justified cuenta con un final más épico y logrado, mientras que Bosch comete, a mi modo de ver, el error de cerrar la trama más potente en el penúltimo capítulo, lo que le resta fuerza al siguiente.

Lo que también une a las dos series es su éxito. Tras el cierre abrupto de Deadwood, como decía, Oliphant encontró la producción donde lucirse durante seis temporadas, y recientemente volvió a la carga con uno de tantos revivals a los que ya nos hemos acostumbrado, aquí con la gracia de adaptar la novela de Leonard Ciudad salvaje con la incorporación de Raylan en una propuesta de lo más inusual. En cuanto a Bosch, tras siete temporadas ha tenido su continuidad natural en Bosch Legacy, donde el protagonista sigue desentrañando crímenes, ahora como investigador privado.

Personalmente, en lo referente a la primera temporada, me quedo con Justified, digamos que es más divertida e imprevisible, y se agradece ese toque western, mientras Bosch quizás resulta un tanto demasiado clásica y formal pese a su innegable calidad. Al final, ambos policías acaban imponiendo su particular modo de ver la ley.

 

 

jueves, 28 de marzo de 2024

El estreno: Lea Seydoux y el amor (by ChatGPT)


La llegada de nuevos títulos a la cartelera se reduce a mínimos ante las vacaciones de Pascua, tiempo propicio (meteorología mediante) para los viajes.

Eso sí, no falta entre la escasa oferta el blockbuster de turno, con una cinta que podríamos calificar de histórica, Godzilla y Kong El nuevo imperio, ya que hemos tenido que esperar décadas para ver a los dos célebres monstruos repartiendo estopa... esta vez en el mismo bando. Ahora solo falta (tiempo al tiempo) que se enfrenten a los Cazafantasmas...

De Argentina nos llega Puan, película que ya empieza a caernos bien al autodefinirse como Una comedia filosófica de proporciones existenciales. Y es que nos encontramos con la lucha entre dos filósofos --uno de ellos encarnado por Leonardo Sbaraglia-- por hacerse con una cátedra universitaria.

Pero quien viene a salvar el fin de semana es Francia con dos títulos. El primero, Las cosas sencillas, es la clásica comedia gala donde, en esta ocasión, a un hombre de negocios interpretado por Lambert Wilson le deja tirado su coche en pleno entorno rural y entabla diálogo con un campesino.

El segundo es el film más ambicioso de la semana, The beast, con guión y dirección de Bertrand Bonello a mayor gloria de Lea Seydoux, que aquí va a disponer para lucirse de mucho más que el minuto mal contado que le dejan en Dune 2. Romanticismo en tiempos de Inteligencia Artificial en una original cinta que discurre en tres épocas distintas en busca del significado del amor.