sábado, 30 de diciembre de 2023

El estreno: Kaurismaki se nos pone romántico


Despedimos el año y lo hacemos con pocas novedades (es lo que tiene que todo el mundo está de fiesta), pero con un par de pesos pesados.

El primero de ellos es Taika Waititi, que dirige el único estreno que nos llega de Hollywood, El peor equipo del mundo. En ella el director de las dos últimas entregas de Thor y la magnífica Jojo Rabbit sigue apostando por la comedia y nos trae la historia real del equipo de fútbol de la Samoa Americana, que tras perder por 31-0 ante Australia en el Mundial de 2001 en la peor derrota en la historia de esta competición, trata de resurgir con el Mundial de 2014 en perspectiva, para lo que contrata a un entrenador danés en horas bajas a quien da vida un Michael Fassbender poco habitual en la comedia.

También tenemos una única novedad de casa, la catalana Teoria dels cossos, primera de las cintas románticas de la semana, donde seguimos a un hombre y una mujer que inician una relación tras coincidir en varios actos culturales.

El otro toque español del fin de semana lo pone Jacob Petrus, presentador del programa Aquí la Tierra de TVE, narrador de la francesa Kina & Yuk, una de esas combinaciones de documental de animales y película que aquí sigue a una pareja de zorros árticos que debido al deshielo queda separada de sus cachorros.

También tenemos la italiana Disco Boy, que pese a su título narra la historia de un inmigrante que llega a París para alistarse en la Legión Extranjera, en paralelo con las vivencias de un joven que lucha contra la amenaza de las compañías petroleras en Níger  y también las de su hermana.

Y acabamos con el auténtico peso pesado, nada menos que Aki Kaurismaki. El célebre cineasta finlandés, uno de los directores independientes más admirados, regresa con Fallen leaves, donde se pasa al cine romántico, siempre, eso sí, en su único e inimitable estilo. Resultado, su inclusión en la mayoría de listas de lo mejor del año, y en muchos casos en el primer lugar. Así que la mejor película de 2023 puede ser la última en llegar.

Que tengáis un feliz año, y que 2024 nos traiga más y mejor cine. 



viernes, 22 de diciembre de 2023

El estreno: Juliette Binoche vuelve a meterse en la cocina


Llega la Navidad, y con ella una selección de estrenos bastante potentes, donde tenemos un poco de todo.

Eso sí, no destacan especialmente las novedades de casa, quizás temiendo el efecto Bayona. Solo llegan la cinta de animación Heavies tiernos, donde este tipo de música salva a dos jóvenes en la Barcelona de 1991, y Cuánto me queda, comedia con un punto de partida que vimos hace nada en la cinta Amigos hasta la muerte, entonces con Marta Hazas y Javier Veiga, es decir, cómo afecta a un grupo de personas el descubrir que una de ellas está a punto de morir, ahora con Antonio Pagudo, Eva Ugarte, Kira Miró y Salva Reina.

Sí van a por todas desde Hollywood, eso sí, con dos propuestas bien distintas: Aquaman. El reino perdido es la secuela del salto a la pantalla del superhéroe acuático de DC, de nuevo con Jason Momoa y Patrick Wilson --Amber Heard se queda fuera por su pelea judicial con Johnny Depp--, y con James Wan a los mandos, y Migración. Un viaje patas arriba (desde luego prefiero el título que le han puesto en Hispanoamérica, ¡Patos!), otra de animación a cargo del estudio Illumination, es decir, el de Los minions y Super Mario Bros, que promete risas con una familia de patos que inicia por primera vez un viaje al Caribe... para quedar atrapados en Nueva York.

De los USA a Reino Unido con la más que interesante Femme, vuelta de tuerca al género negro con una drag queen que sufre un brutal ataque homófobo e inicia una particular venganza contra su agresor --a quien da vida George MacKay, el protagonista de 1917-- al coincidir con él en una sauna gay.

El periplo internacional nos lleva a la India, de donde nos llega Dunki, dos horas y media para contar la odisea de cuatro amigos --uno de ellos una chica-- que tratan de hacer realidad su sueño de viajar desde Punjab a Inglaterra, y Francia, donde el inclasificable Michel Gondry (Olvídate de mí) vuelve a hacer de las suyas en El libro de las ilusiones, cinta donde nos presenta las peripecias de un director tan peculiar como él.

Pero me quedo con la otra película gala de la semana, la que presenta su candidatura a los próximos Oscar, A fuego lento. Un drama romántico alrededor de la cocina dirigido por el vietnamita Tran Anh Hung y protagonizado nada menos que por Benoit Magimel y Juliette Binoche, que regresa a los fogones tras Chocolat (2000), que por supuesto dura dos horas y media. Bon appetit... i Bon Nadal

martes, 19 de diciembre de 2023

El estreno: Bayona va a por todas


Último fin de semana de estrenos antes de Navidad y parece que lo que se lleva son los biopics.

En coproducción entre Reino Unido y Estados Unidos tenemos dos, por un lado Golda, cinta que llega en un momento bastante inoportuno, ya que se trata de la biografía de Golda Meir, quien fuera apodada como la Dama de Hierro de Israel por su gestión como primera ministra, y especialmente durante la guerra del Yom Kippur.  Oportunidad de lucimiento para su protagonista, Helen Mirren, y en parte puede ayudarnos a comprender cómo se ha llegado a la actual situación entre Israel y los palestinos.

La otra biografía es la del escritor Samuel Beckett, a quien da vida Gabriel Byrne en Dance first. Y de un autor a otro, ya que el poeta Rimbaud es el centro de la coproducción hispano-franco-marroquí Splendid Hotel: Rimbaud en África, dirigida por el español Pedro Aguilera y que aborda los últimos días del autor francés, convertido en traficante de armas en África.

Otra coproducción a tres bandas es la que une a Francia con Canadá e Italia en la adaptación del best-seller La trenza a cargo de la italiana Laetitia Colombani, donde se entrecruzan tres historias protagonizadas por mujeres y con Kim Raver, habitual de series como Anatomía de Grey o 24 como rostro más reconocible.

De los USA nos llegan sendas propuestas con toque español. El musical Camino a Belén nos trae la historia del nacimiento del niño Jesús al más puro estilo Disney y con Antonio Banderas como un histriónico Herodes, mientras que Champions (no se han roto mucho la cabeza con el título, no) es el remake de nuestra Campeones con Bobby Farrelly en la dirección y Woody Harrelson en el papel que aquí interpretaba Javier Gutiérrez.

Y empezamos con los estrenos españoles con Alteritats, documental que muestra las vivencias lésbicas de cuatro generaciones en Cataluña, para seguir con La última noche de Sandra M., donde una joven actriz de 18 años que aspira a hacer películas serias en plena época del destape trata de afrontar un embarazo no deseado.

Acabamos con una de las películas más esperadas de los últimos tiempos, La sociedad de la nieve, coproducción entre España, donde acapara nominaciones a los Goya, y Estados Unidos, donde también opta a varios Globos de Oro. Lo nuevo de Juan Antonio Bayona, que no baja de las ya habituales dos horas y media de metraje, vuelve a llevar a la gran pantalla la impactante tragedia de un equipo de rugby uruguayo que se estrelló en los Andes en 1972 obligando a los supervivientes a vivir una auténtica odisea para sobrevivir, que incluyó alimentarse de los compañeros fallecidos como último recurso. La cinta llega, pues, medio siglo después de los acontecimientos originales, y 30 años después de la anterior versión fílmica, ¡Viven!, todo un taquillazo y con muy buenas críticas en su momento, a cargo de Frank Marshall y con Ethan Hawke como estrella. Bayona ha optado por actores uruguayos desconocidos de la misma edad que los protagonistas actuales, quienes ahora hablan maravillas del director español pero supongo que en unos años le pondrán a parir por prácticamente someterles al mismo calvario que a los pasajeros originales, incluido frío, aislamiento y adelgazamiento, para hacer el film lo más realista posible. Total para estrenarlo en Netflix, con solo un par de semanas antes en los cines. Pero a Carlos Boyero le ha gustado, y eso ya es un logro en estos tiempos.


miércoles, 6 de diciembre de 2023

El estreno: Anatomía de una pareja


La cartelera no da tregua y suma nuevos títulos aprovechando el largo puente festivo de esta semana.

Al menos en cantidad, dominio USA, que nos trae, para empezar, la cinta de terror La partitura, donde una misteriosa melodía desata el horror. Más amable, Wonka es la precuela musical de la mítica historia de Roald Dahl Charlie y la fábrica de chocolate, con el origen del famoso Willy Wonka, a quien aquí da vida en su versión juvenil Timothée Chalamet mientras aguarda el estreno de la segunda parte de Dune. Pero lo más interesante llega de Netflix, que vuelve a estrenar antes en cine Maestro, nuevo intento de Bradley Cooper por llevarse todos los Oscar, delante y detrás de las cámaras, esta vez con la biografía del compositor Leonard Bernstein en la que Carey Mulligan interpreta a su esposa, Felicia Montealegre.

En casa la única novedad es Robot dreams, lo nuevo de Pablo Berger, que tras Blancanieves y Abracadabra se pasa al cine de animación con la sorprendente historia de un perro y un robot.

Y acabamos en Francia con Anatomía de una caída, que se perfila como una de las películas del año. Palma de Oro en Cannes, la cinta, cuyo título no sé si homenajea la Anatomía de un asesinato (1959) de Otto Preminger, analiza exhaustivamente una relación de pareja a partir de la muerte del marido tras una misteriosa caída, que lleva al juicio de la esposa, acusada de homicidio. Una ocasión para reflexionar sobre las relaciones de pareja.

domingo, 3 de diciembre de 2023

El estreno: ¿Qué es la libertad?


Ahora sí, empezamos, que la semana viene cargadita. España domina por cantidad, empezando por dos aspirantes a romper la taquilla prenavideña y directamente navideña. Por un lado, Ocho apellidos marroquís, tercer capítulo de la saga, que pretende reeditar taquillazos previos, aunque con un reparto totalmente renovado que encabezan Michelle Jenner, Elena Irureta y Julián López, y ahora con Álvaro Fernández-Armero en la dirección. Por otro, La Navidad en sus manos, con Santiago Segura como Papá Noel y Ernesto Sevilla como su improbable sustituto.

Ya en plan más modesto, La mesita del comedor convierte al susodicho mueble en el detonante de una crisis de pareja, mientras Una noche con Adela sigue a una barrendera del turno de noche de Madrid dispuesta a ajustar cuentas con quienes han destrozado su vida, y Sobre todo de noche, a priori la más prometedora de la semana, nos propone un duelo actoral entre Lola Dueñas y Ana Torrent en una trama que recupera el drama de los niños robados.

Iniciamos el periplo internacional en los USA, de donde solo nos llega la comedia de Rebecca Miller Llegó a mí, con Peter Dinklage como un compositor de ópera casado con Anne Hathaway que vuelve a inspirarse tras serle infiel con Marisa Tomei. En la italiana El rapto, Marco Bellocchio vuelve a cargar contra la Iglesia con la historia real de un niño de siete años que fue raptado por el Papa en 1858, desatando una tormenta judicial. Seguimos con la polaca En nombre de la tierra, donde los responsables de Loving Vincent continúan con su estilo de animación tan personal para contarnos la historia de una joven rebelde en lucha contra el patriarcado, mientras la ucraniana Nosotras, mañana, otra de las propuestas más interesantes de la semana, presenta a cinco chicas del Donbás que tratan de mantener vivos sus sueños en medio de la guerra.

Y acabamos en Argentina con Los delincuentes, otro film de 3 horas, cada vez más la duración media de una película, donde Rodrigo Moreno nos hace una curiosa pregunta: ¿Prefieres pasar tres años y medio en la cárcel o 25 años trabajando en un banco? Una clásica trama de robo en un banco se convierte así en punto de partida para reflexionar sobre qué es realmente la libertad. Una propuesta que adquiere ahora una nueva dimensión tras el triunfo de Milei en las elecciones argentinas, poniendo aún más de actualidad esta película que Argentina presenta a los próximos Oscar.

sábado, 2 de diciembre de 2023

La más grande


Iba a repasar los estrenos del fin de semana, pero la actualidad manda, tristemente. No por esperado resulta menos doloroso el fallecimiento este sábado, a sus 84 años, de Concha Velasco, la mejor actriz española de todos los tiempos. Al menos para quien escribe estas líneas, y que venga quien quiera a rebatirlo.

No pudo ser más oportuna À Punt, que precisamente este viernes programó un especial dedicado a repasar la figura de Conchita Velasco, con entrevista a la propia cómica incluida. Durante la misma, en una declaración de humildad, medio bromeaba con que ella no era la más grande, sino Rocío Jurado. Pero sí, centrándonos en la interpretación, la Velasco ha sido la más grande.

Fue una auténtica todoterreno, que como tantas estrellas de su generación, empezó con papeles muy comerciales que la mostraban simplemente como una chica mona en películas como Las chicas de la Cruz Roja (1958) o El día de los enamorados (1959), y por si en La verbena de la paloma (1963), la mejor adaptación de la popular zarzuela, no había quedado claro que cantaba y bailaba tan bien como interpretaba, en Historias de la televisión (1965) cantó una canción que no ha perdido un ápice de popularidad en seis décadas, La chica ye-ye. En la citada entrevista para À Punt Concha reconocía que durante un tiempo renegó de aquella imagen para acabar reivindicando su éxito imperecedero. Y es que la actriz será para siempre esa chica ye-ye...

...pero también mucho más. Porque, ya lo decíamos, como tantos de su generación, tras los 60 llegó la Transición y la oportunidad de triunfar como actriz seria, en films como La colmena (1982), Esquilache (1989), Más allá del jardín (1996) o Yo  me bajo en la próxima, ¿y usted? (1992), en la que asumía el mismo rol que ya había interpretado en la versión teatral de esta obra de Adolfo Marsillach.

Y es que el teatro fue donde quizás la Velasco brilló todavía más, demostrando esa capacidad para dar el máximo en cada papel, ya fuese en clásicos como el Tenorio o Filomena Marturano, en musicales como el celebérrimo Mamá, quiero ser artista, e incluso adaptaciones como el Hello, Dolly! que protagonizara en su momento Barbra Streisand.

Capítulo aparte merece su andadura televisiva, en la que destaca por encima de todo Teresa de Jesús (1984), en la que ofrece el que, tal vez, es su mejor trabajo. En los últimos tiempos la veríamos  en producciones de lujo como Herederos, Gran Hotel o Velvet, sin olvidar aquella versión española de Las chicas de oro junto a nada menos que Lola Herrera, Carmen Maura y Alicia Hermida. O, en su faceta de presentadora, pilotando una de las etapas de Cine de barrio, con lo que cerraba el círculo.

Siempre impecable, y sobre el escenario hasta que la salud se lo permitió, tenía clase hasta cuando hacía anuncios de compresas para pérdidas de orina sin que se le cayeran los anillos. En resumen, una señora con mayúsculas, y una actriz sin la que no se puede entender el cine español, ni nuestro teatro ni nuestra televisión.

La echaremos mucho de menos.

PD: À Punt programó este viernes París-Tombuctú (1999), la última película de Luis García Berlanga, con el que finalmente pudo trabajar Concha Velasco. En un film tan coral como la mayoría del director valenciano, la actriz tenía uno de los papeles principales, donde a sus 60 años interpretaba a una mujer que buscaba de manera desinhibida su propio placer --ganándose el apelativo putón por parte de varios de los personajes masculinos--, protagonizando varias escenas de desnudos con un descaro y naturalidad desbordante, comiéndose la pantalla como siempre. E incluso lucía vestimenta de capitana mora en una filà. Lo dicho. Genio y figura.