El estreno: Jack Sparrow se despide

Blockuster al canto, empezamos ya a salir a casi uno por semana, acompañado por numerosos estrenos, pero ninguno que parezca poder hacerle competencia.

Los estrenos en lengua hispana se reducen a dos, ambos latinoamericanos y bien distintos. Me casé con un boludo, como cabía esperar, es una comedia argentina que vuelve a reunir a Adrián Suar y Valerie Bertucelli después de Un novio para mi mujer, con una divertida premisa: un actor y una actriz se conocen en un rodaje, se casan y entonces ella descubre que se ha enamorado del personaje y que su marido es idiota.

Nada que ver con la colombiana Pizarro, documental sobre el abogado que consiguió la paz en Colombia aunque resultase asesinado en el proceso, visto a través de su hija.

Iniciamos el recorrido europeo con El rey de los belgas, coproducción a modo de falso documental sobre Nicolas III, y seguimos con la francesa Las películas de mi vida, documental en el que el cineasta Bertrand Travernier nos habla de los films que más le han marcado.De Francia también nos llega Las confesiones, una de las propuestas más interesantes de la semana, que une reflexión sobre el capitalismo e intriga, con el asesinato del director del Fondo Monetario Internacional tras confesar sus pecados a un monje en plena reunión de ministros europeos para tomar una importante decisión que afecta a la economía mundial.

De Irlanda nos llega Entre los dos, que puede ser un telefilm de sobremesa o algo más apreciable, con Aidan Gillen, es decir, Meñique en Juego de tronos, como un recluso que acaba de salir de prisión y tiene que hacerse cargo de su sobrina pequeña. 

En la japonesa Nagasaki, Recuerdos de un hijo tenemos a una mujer que pierde a su hija en la Segunda Guerra Mundial, pero a la que este se le aparece de pronto. La alemana Paula se centra en la biografía de la artista Paula Becker, y de los USA nos llega Wilson, vehículo de lucimiento para Woody Harrelson, como un personaje solitario y neurótico que se reconcilia con su mujer, interpretada por Laura Dern, y descubre que tiene una hija adolescente.

Y nos queda el estreno de la semana, La venganza de Salazar, o lo que es lo mismo, la ya quinta entrega de Piratas del Caribe. No es que la cuarta entrega fuese mala, pero la saga ya ha entrado en fase soporífera, sin novedad alguna. De hecho, a tenor del trailer, parece querer recuperar la historia original, con unos clones más jóvenes de Orlando Bloom y Keira Knightley, quienes, curiosamente, vuelven a la saga en el que, por cierto, también se anuncia como capítulo final. No fallan Jhonny Depp ni Geoffrey Rush -su ausencia en el segundo capítulo ha sido el mayor error de la serie- y la novedad es Javier Bardem, después de que Penélope Cruz apareciese en la cuarta. Esperemos que sea una buena despedida.

El estreno: Juan Diego se despide... otra vez

Semana con pocos estrenos, pero con tres que van un poco de tapados y pueden dar pero que mucho.

Antes, iniciamos nuestra tourneé por Canadá con Boris sin Beátrice, drama con la relación entre un hombre y tres mujeres, una de las cuales es su esposa y además ministra...

De Francia nos llega Personal shopper, que puede ser la bizarrada de la semana... o no. Olivier Assayas repite con Kristen Stewart como una, obviamente, personal shopper en París, en una suerte de cinta de terror gótico... o algo parecido.

Y empezamos con el trío de cabeza. De los USA nos llega una de las películas revelación, sin hacer mucho ruido, del año, Déjame salir. Claro que el título original, Get out, es más bien algo así como 'Sal pitando'. Entre el slasher y el cine de denuncia social, arranca recordando a Adivina quién viene esta noche, con un joven negro (Daniel Kaluuya, ya visto en films como Sicario) que acude a conocer a los padres de su novia (Alison Williams, de la serie Girls). Los progenitores son Catherine Keener y Bradley Whitford, y pronto el protagonista empieza a notar que algo no va bien...

El caso Sloane es otro acierto seguro, también procedente de los USA, y con Francia de por medio. Si la anterior nos revela a Jordan Peele como un director muy a tener en cuenta, aquí vuelve John Madden, ese señor que dirigió Shakespeare in Love, por ejemplo, pero que ha tenido una carrera muy irregular. Aquí lo juega todo a Jessica Chastain, a la que ya dirigió en la más que apreciable La deuda, aquí como una mujer sin escrúpulos enfrentada a los carteles de armas. Y si encima tenemos en el reparto a John Lithgow, Mark Strong o Michael Stuhlbarg... Cine político de altos vuelos.

Pero me quedo con el estreno español de la semana, No sé decir adiós, o lo que es lo mismo, al menos sobre el papel, nueva lección magistral de Juan Diego, más que bien flanqueado por Nathalie Poza y Lola Dueñas. Lástima que recuerde un tanto a Anochece en la India, también protagonizada no hace mucho por Diego, otra road movie con protagonista en fase terminal. Pero es Juan Diego...

El estreno: Dinero, dinero, dinero

Pues no, el estreno de la semana no es Alien Covenant, más que nada por ese bodrio absoluto que fue su predecesora, Prometheus, 'empastre' donde las haya, y ya rematamos con la divertida idea de Ridley Scott de rodar cuatro pelis más... ni que fuera Cameron.

Así que nos olvidamos del bicho -y de Fassbender, que debería dejarse ya de franquicias...- y repasamos novedades. Guardián y verdugo es otra de las películas que nos están llegando las últimas semanas revisitando la historia de Sudáfrica, en este caso sobre las ejecuciones en el corredor de la muerte.

De ahí pasamos a Le llamaban Jeeg Robot, la bizarrada o hallazgo, según se mire, de la semana. Cinta italiana que podríamos emparentar con Kick Ass, sobre un joven que tras conseguir poderes... decide meterse a supercriminal... hasta que una joven lo confunde con el héroe de un cómic...

Todo un veterano, Andrei Konchalovsky, nos trae Paraíso, con tres historias cruzadas en plena Segunda Guerra Mundial y en blanco y negro, y nos quedamos con el cine español, que nos trae dos propuestas más que interesantes.

La primera es Demonios tus ojos, curioso título que nos trae de vuelta a Ivana Baquero, la niña de El laberinto del fauno, ahora bastante crecidita, que arranca con un punto de partida más que turbador: ¿y si estuvieras viendo porno en internet y reconocieras a tu hermana pequeña como una de las actrices? Eso es lo que le ocurre a un joven afincado en Los Ángeles, que decide entonces regresar a Madrid para reencontrarse con su familia y buscar respuestas.

Y terminamos con Money, debut pasado por los USA de Martín Rosete, con caras conocidas como Jesse Williams, de Anatomía de Grey, o Kellan Lutz, de Crepúsculo. Historia negra sobre dos parejas, dos maletines llenos de dinero y un enigmático vecino. Diálogos, cine claustrofóbico... y sin alien.

El estreno: La ciudad perdida de James Gray

Películas y más películas en una cartelera que no para de renovarse, así que vamos con los estrenos del pasado fin de semana.

Empezamos con las novedades españolas, lideradas por Pasaje al amanecer, otra película de reuniones y mucho diálogo, en este caso con un joven fotógrafo que es enviado a cubrir la guerra de Irak y elige justamente la Nochebuena para comunicárselo a sus familiares. Reparto donde caben desde Lola Herrera o Elvira Domínguez a Andrea Duro, Carles Francino o Nicolás Coronado.

Otra propuesta que puede resultar atractiva es El jugador de ajedrez, desconozco si basada en hechos reales, con un joven campeón español de ajedrez en 1934 que se traslada a vivir a Francia con su pareja y es encarcelado por las SS, utilizando el ajedrez para sobrevivir en prisión.

Herederos de la bestia es un documental que analiza la mítica cinta de Álex de la Iglesia 20 años después de su estreno, y en Casi leyendas encontramos a uno de sus protagonistas, Santiago Segura, que junto a Diego Peretti y Diego Torres encarnan a los componentes de un antiguo grupo rockero de casi éxito que se reencuentran en esta comedia hispano-argentina.

De gira por el mundo, uno de los estrenos de la semana es Un reino unido, la historia de amor real entre el rey de Botwana, encarnado por David Oyelowo, y una oficinista blanca, a la que da vida Rosamund Pike, enfrentados al racimo de sus familias y de los gobiernos británico y sudafricano.

Y a falta de estreno francés, Los demonios nos llega de Canadá con la historia de un joven de 10 años que afronta el paso de la niñez a la adolescencia.

Nos vamos a los USA, empezando con cine de género: el terror llega de la mano de Bye, bye, man, que nos recuerda a Candyman por su argumento, y con Faye Dunaway en su reparto muy poco tiempo después de que su compañero en la mítica Bonnie & Clyde, Warren Beatty, también volviera a la gran pantalla.

Noche de venganza es la propuesta de acción de la semana, con Jamie Foxx como protagonista absoluto, y en El círculo tenemos a Emma Watson tratando de descubrir los secretos de un Tom Hanks que parece un sosias de Steve Jobs en una película sobre los peligros de las redes sociales para nuestra privacidad... o algo por el estilo.

Pero me quedo con La ciudad perdida de Z, película que ya dudaba de que se fuese a estrenar. Su director, James Gray, cambia el género negro que tan bien le fue en La noche es nuestra por el cine de aventuras y adapta la obra de David Grann sobre la expedición real de Percy Fawcett, interpretado por Charlie Hunnam y bien secundado por Sienna Miller y Robert Pattinson, en busca de la ciudad perdida de Z o Eldorado. Si Gray mantiene el pulso, puede ser la película de aventuras del año, claro que más en la línea de Aguirre o la cólera de Dios que La Momia de Brendan Fraser...