Fin de semana cinematográfico adelantado por la Semana Santa y en el que tenemos muy pocas novedades y casi todas made in USA.
Se escapan dos films bastante interesantes, por un lado la japonesa Nuestra hermana pequeña, prometedor drama basado en el manga sobre la reunión de las tres hijas de un hombre que acaba de fallecer, y que las abandonó de pequeñas, con la hija que tuvo este posteriormente. Y por otro, la francesa O los tres o ninguno, en la que su director y guionista aborda con una mezcla de drama y humor la odisea de sus padres, de origen iraní, cuando llegaron a Francia buscando un futuro mejor.
De vuelta en los USA tenemos la tardía secuela de Mi gran boda griega, en la que repite todo el reparto original y que pinta bastante bien, todo lo contrario que Resucitado, nueva recreación de la vida de Jesucristo, o más bien de la búsqueda de su cadáver tras la resurrección a cargo de un grupo de soldados romanos que encabeza Joseph Fiennes, bastante perdido desde hace tiempo.
Pero el estrenón de la semana, y uno de los del año, es Batman vs Superman, secuela del último Superman al tiempo que reboot de Batman tras la etapa de Nolan y puesta en marcha de la Liga de la Justicia. Tal vez demasiado para un director como Zack Snyder que a veces se embrolla un pelín. Pero habrá que verla... aunque sea para descubrir si el enfrentamiento entre los dos iconos le hace justicia al visto en la versión en papel de The dark knight returns, el mítico cómic de Frank Miller.
