domingo, 28 de mayo de 2017

El estreno: Jack Sparrow se despide


Blockuster al canto, empezamos ya a salir a casi uno por semana, acompañado por numerosos estrenos, pero ninguno que parezca poder hacerle competencia.

Los estrenos en lengua hispana se reducen a dos, ambos latinoamericanos y bien distintos. Me casé con un boludo, como cabía esperar, es una comedia argentina que vuelve a reunir a Adrián Suar y Valerie Bertucelli después de Un novio para mi mujer, con una divertida premisa: un actor y una actriz se conocen en un rodaje, se casan y entonces ella descubre que se ha enamorado del personaje y que su marido es idiota.

Nada que ver con la colombiana Pizarro, documental sobre el abogado que consiguió la paz en Colombia aunque resultase asesinado en el proceso, visto a través de su hija.

Iniciamos el recorrido europeo con El rey de los belgas, coproducción a modo de falso documental sobre Nicolas III, y seguimos con la francesa Las películas de mi vida, documental en el que el cineasta Bertrand Travernier nos habla de los films que más le han marcado.De Francia también nos llega Las confesiones, una de las propuestas más interesantes de la semana, que une reflexión sobre el capitalismo e intriga, con el asesinato del director del Fondo Monetario Internacional tras confesar sus pecados a un monje en plena reunión de ministros europeos para tomar una importante decisión que afecta a la economía mundial.

De Irlanda nos llega Entre los dos, que puede ser un telefilm de sobremesa o algo más apreciable, con Aidan Gillen, es decir, Meñique en Juego de tronos, como un recluso que acaba de salir de prisión y tiene que hacerse cargo de su sobrina pequeña. 

En la japonesa Nagasaki, Recuerdos de un hijo tenemos a una mujer que pierde a su hija en la Segunda Guerra Mundial, pero a la que este se le aparece de pronto. La alemana Paula se centra en la biografía de la artista Paula Becker, y de los USA nos llega Wilson, vehículo de lucimiento para Woody Harrelson, como un personaje solitario y neurótico que se reconcilia con su mujer, interpretada por Laura Dern, y descubre que tiene una hija adolescente.

Y nos queda el estreno de la semana, La venganza de Salazar, o lo que es lo mismo, la ya quinta entrega de Piratas del Caribe. No es que la cuarta entrega fuese mala, pero la saga ya ha entrado en fase soporífera, sin novedad alguna. De hecho, a tenor del trailer, parece querer recuperar la historia original, con unos clones más jóvenes de Orlando Bloom y Keira Knightley, quienes, curiosamente, vuelven a la saga en el que, por cierto, también se anuncia como capítulo final. No fallan Jhonny Depp ni Geoffrey Rush -su ausencia en el segundo capítulo ha sido el mayor error de la serie- y la novedad es Javier Bardem, después de que Penélope Cruz apareciese en la cuarta. Esperemos que sea una buena despedida.

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