El estreno: Mario Casas, ahora tras la cámara

Acaba el verano y parece que los blockbusters también. Lo más parecido son las dos propuestas que nos llegan este fin de semana desde los USA, la cinta de terror No tengas miedo y el regreso animado de las Tortugas Ninja en Caos mutante.

Bien distinta es la otra propuesta animada de la semana, No se admiten perros ni italianos, coproducción internacional con la que iniciamos el repaso a las cintas que nos llegan de todas partes del globo, y en las que este fin de semana abundan las historias de sentimientos. Aquí, por ejemplo, la de una familia italiana que a principios del siglo XX busca un futuro en la vecina Francia.

Del país galo nos llega precisamente Verano con Fifí, donde una joven de 15 años se mete a pasar el verano en la mansión de una amiga... donde se encuentra al hermano mayor de esta que la deja quedarse.

En lo alto es la última novedad de Corea del Sur, donde un cineasta se replantea su vida mientras sube los pisos de un edificio a donde ha ido a ver a una vieja amiga para que aconseje a su hija.

Y El viaje de Harold es lo que nos llega de Reino Unido, con el gran Jim Broadbent y un argumento que nos recuerda mucho a la magistral Una historia verdadera de Lynch: un hombre recibe una carta de una antigua compañera de trabajo de la que no ha sabido nada durante 20 años, y que le dice que está ingresada a punto de morir. Entonces le escribe una carta de respuesta, pero cuando va a echarla al buzón... inicia un recorrido a pie de parte a parte del país para llevarla en persona.

Hablamos, pues, del primer potencial estreno de la semana, y los otros son las dos novedades españolas. Para empezar, Las chicas están bien, debut en la dirección de la actriz navarra Itsaso Arana, a la que también tenemos aquí delante de las cámara magníficamente acompañada por Irene Escolar y Bárbara Lennie, entre otras, en la historia de un grupo de chicas que pasan una semana de verano ensayando una obra de teatro y, en fin, descubriendo la vida. Apunta a una de las sorpresas del año.

Y para acabar, Mi soledad tiene alas, el film que cuenta con mayor repercusión mediática por su responsable. Y es que aquí tenemos otro debut en la dirección, el de Mario Casas, que no parece conformarse con ser la, tal vez, mayor estrella patria (lo de actor lo dejamos para otro día), y ha decidido contarnos una historia de su barrio con tintes sociales y con su hermano Óscar como estrella. Habrá que ver qué debut se salda con mejor nota.