Pues sí, existe vida más allá de Superlópez, empezando por el nuevo vehículo para lucimiento de Dani Rovira, a quien no le basta con un megaéxito y quiere otro, Miamor perdido, en el que le acompañan delante de la cámara Michelle Jenner y Pablo Carbonell, y detrás Emilio Martínez Lázaro, quien ya le dirigiera en las dos entregas de Ocho apellidos...
De España nos llega también el drama gallego Trote, con María Vázquez y Celso Bugallo... y a España volveremos después precisamente con el estreno de la semana. Antes, de los USA nos llega solo un aspirante a taquillazo que de momento parece que se la está pegando bien, Ingenios Mortales, adaptación de la serie de novelas de fantasía sobre ciudades rodantes, que tiene a Peter Jackson como productor, y Ana y el apocalipsis, cruce entre peli de zombis y musical con prota adolescente.
De Dinamarca nos llega Expediente 64, la última entrega cinematográfica, tercera, creo, de Los casos del departamento Q, tras dos primeras más que apreciables. La novedad británica es La búsqueda de la felicidad, un drama de búsqueda interior a mayor gloria de Gemma Arterton, mientras de Italia nos llega Acuarela, con Valeria Golino que interpreta a una invidente que se enamora del personaje interpretado por Adriano Giannini.
Y la elegida es Yuli, giro de timón para Iciar Bollaín, de nuevo sobre un guión de su pareja, Paul Laverty, que nos cuentan la biografía del cubano Carlos Acosta, primer bailarín negro en interpretar personajes para blancos en los más prestigiosos ballets del mundo. Y parece que lo han hecho a lo grande.
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