Paupérrimo fin de semana de estrenos, en la antesala de los Oscar que se entregan esta noche, y liquidados los -escasos- reestrenos españoles tras los Goya, que apenas han dado una segunda vida en la cartelera a la gran vencedora de este año, Vivir es fácil con los ojos cerrados.
De Francia nos llega la comedia París a toda costa y de Alemania el drama ¿Qué nos queda? Incluso Hollywood se muestra en horas bajas, con un único estreno, El poder del dinero, thriller económico de bajos vuelos que enfrenta a los veteranos Harrison Ford y Gary Oldman secundados por Liam Hemsworth -que parecer más bien el protagonista de la cinta- y la explosiva Amber Heard, la nueva prometida de Johnny Depp.
Así que lo único salvable es Philomena, el regreso por la puerta grande del británico Stephen Frears a mayor gloria de Judi Dench, con un recital que podría proporcionarle hoy el Oscar a la mejor actriz... si este no pareciera reservado para Cate Blanchett por lo último de Woody Allen. Para ambas sería su segunda estatuilla, aunque la que ya ganaron era como actriz secundaria. Aquí parece que la Dench lo borda como una madre que busca a su hijo desaparecido en un caso de 'bebés robados' basado en una historia real, por supuesto.
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