Llega una semana con poco pero bueno, y es que todos, o casi, los estrenos que nos llegan tienen algún punto de atención.
Vamos por parejas, y empezamos con el panorama internacional. De Francia nos llega Sin filtro, una de esas comedias con mucho drama, donde todo se revoluciona con la publicación de un libro cuyo autor, tras un accidente, perdió la vista y ganó la facultad de decir las cosas tal como las piensa. La otra novedad europea es Sorry we missed you, donde el británico y siempre comprometido Ken Loach se reencuentra con su guionista de cabecera y pareja de Iciar Bollaín, Paul Laverty, para contarnos la historia de un hombre que tras pasar por mil empleos lo fía todo a las últimas aplicaciones y se convierte en su propio jefe como repartidor.
Pareja ambiciosa la que nos llega de los USA, con dos secuelas más. Por un lado, la sexta entrega de Terminator: Destino oscuro, que a la vez es el tercer intento de seguir explotando la franquicia, ahora con el regreso de James Cameron aunque sea como productor. Así que oficialmente este sería el tercer capítulo de la saga, de nuevo con Schwarzenegger y sobre todo el regreso de Linda Hamilton, a quienes se une, entre otras, Mackenzie Davis. Nada nuevo bajo el sol. Mucho más interesante se presenta la otra secuela de la semana, Doctor Sueño, es decir, la continuación de El resplandor de Stephen King, ahora con Ewan McGregor como el ya no tan pequeño Danny Torrance, 40 años después de los hechos originales. Y en el reparto también encontramos a Rebecca Ferguson, una de mis debilidades tras las dos últimas entregas de Misión: Impossible, así que le ha faltado muy poco para ser el estreno de la semana.
La última pareja es la destinada al público infantil, con Granjaguedón, la nueva aventura de la oveja Shaun en la gran pantalla, a cargo del creador, entre otras, de Wallace y Goomit (¡viva la animación en plastilina!), y la primera novedad española de la semana, Los Rodríguez y el más allá, lo último con guión y dirección de Paco Arango, siempre con una causa solidaria, y aquí el protagonismo de Edu Soto y la veteranísima Geraldine Chaplin.
Y la palma se la lleva la otra novedad nacional, La trinchera infinita, que sigue demostrando que se avecinan unos Goya de órdago. Amenábar ya tiene competencia, y no solo la de Almodóvar, puesto que el film que nos llega esta semana también aborda la guerra civil, esta vez con un planteamiento que nos recuerda a Los girasoles ciegos de Cuerda, con un hombre que se oculta en un sótano de su casa, un escondite provisional donde pasará más de 30 años. Antonio de la Torre, pues, busca su segundo Goya consecutivo, aunque tendrá que lidiar a buen seguro con al menos Karra Elejalde y Antonio Banderas, ahí es nada.
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