La animación a la que me acabo de referir viene sobre todo de los USA, que nos traen el segundo intento de salto a la gran pantalla de Super Mario Bros (parece que ahora más logrado, en una cinta de animación pensada para los fans) y a Russell Crowe como El exorcista del Papa. Aunque la que tiene mejor pinta es Air, el regreso de Ben Affleck a la dirección, y acompañado ante las cámaras como en los viejos tiempos por su compi Matt Damon, además de Jason Bateman, Viola Davis o Marlon Wayans para contarnos la alianza entre Michael Jordan y Nike.
La única novedad patria es De caperucita a loba, comedia a mayor gloria de Elena Irureta como una mujer que cambia de actitud tras sus constantes desengaños amorosos. Cinta en la que también encontramos a José Mota, Antonio Resines o Berto Romero.
Sin cambiar de idioma tenemos la argentina Empieza el baile, con los veteranos Darío Grandinetti Agostina Pozzi como la pareja de tango más famosa que se reencuentra tras 30 años sin verse y emprenden una road movie con un compañero repasando su vida y sentimientos.
La inevitable película francesa de la semana es El inocente, de Louis Garrel, en la que el protagonista se pone en guardia cuando descubre que el nuevo novio de su madre un exatracador salido de la cárcel.
Pero me quedo con la británica Blue Jean, debut en la dirección de Georgia Oakley que nos lleva a finales de los 80, con Margaret Thatcher legislando en contra de los homosexuales, lo que obliga a una profesora de gimnasia a llevar una doble vida hasta que la llegada de una nueva alumna le hace replanteárselo todo.
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