Este fin de semana destaca lo que podríamos denominar el antiblockbuster del verano. El nuevo reboot de Los 4 fantásticos, destinado a ser uno de los taquillazos del año, lleva camino de convertirse en un desastre de recaudación, abortando los planes de Fox para reflotar una de las franquicias de Marvel que ahora siguen en sus manos. Pese a que el director, Josh Trank, brilló en su debut con la apreciable Chronicle, también vinculada al género superheroico pero de una manera muy realista, aquí parece que ha fallado todo, desde la elección de actores al enfoque de la historia, y todos han acabado tirándose los trastos a la cabeza.
Así que no es este el estreno de la semana, que bien podría haber sido Cut Bank, cinta de género negro que ha sorprendido a más de uno por su cercanía a los films de los hermanos Coen, y que cuenta en su reparto con los jóvenes Liam Hemsworth y Teresa Palmer, junto a veteranos de la talla de Billy Bob Thornton o John Malkovich.
Menos interés presentan las dos comedias de la semana, la gamberra Vacaciones que nos llega desde los USA, y la última propuesta gala, de título muy festivo: Amar, beber y cantar.
Pero el estreno de este fin de semana es Mr Holmes, reencuentro entre el gran sir Ian McKellen y el director Bill Condon, que ya le dio uno de sus mejores papeles, el del cineasta James Whale, en la magnífica Dioses y monstruos. McKellen tiene la oportunidad de añadir el mítico detective a su lista de personajes no menos míticos, que ya incluye al Gandalf de El señor de los anillos o al Magneto de los X-Men. Y lo hace en un tono crepuscular, dando vida a un Holmes retirado que vuelve a la actividad para resolver un nuevo misterio, en una adaptación de la novela de Mitch Cullin. Una propuesta irrechazable.
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