Semana sin estrenos españoles (parece que acabó la temporada) y con mucha película de sentimientos y relaciones, a excepción, claro, del super mega blockbuster de turno, Fast & Furious X, que no es una peli porno sino la décima entrega de la saga destrozacoches por excelencia. Aunque algo tiene en común con el cine para adultos, y es que como nos recuerdan en la última temporada de Anatomía de Grey (¡la 19 ya!), Fast & Furious es a conducir coches lo mismo que el cine porno al sexo real: nada que ver.
La otra excepción es En busca del mapa perdido, curiosa propuesta de aventuras y tecnología... belga.
No falla Francia con sus dos vertientes principales: ¡Tiburón a la vista! es una comedia que parodia lo que ya os podéis imaginar, mientras La gran juventud sigue a cuatro veinteañeros que a finales de los 80 sueñan con triunfar como actores y actrices.
De Italia nos llega Las ocho montañas, con dos amigos de la infancia, uno de los cuales vive en un pequeño pueblo junto a una montaña y el otro pasa allí los veranos, mientras la canadiense Alice, cariño, nos presenta a Anna Kendrick como una joven víctima de maltrato psicológico por parte de su novio, que reacciona en un fin de semana con sus amigas, provocando la venganza de él. Y en la japonesa Love life una mujer afronta decisiones vitales tras un accidente y el regreso del padre biológico de su hijo.
Un accidente desencadena también la trama en la elegida de la semana, Una buena persona, cinta estadounidense con argumento de telefilme de tarde: una joven provoca involuntariamente un accidente de tráfico en el que mueren la hermana de su prometido y su marido. Entra entonces en una depresión de la que la sacará la amistad con el padre de quien fue su prometido. La cuestión es que ella es Florence Pugh y el padre Morgan Freeman, y ahí me han ganado.
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