sábado, 3 de mayo de 2014

El estreno: Woody chulea a Turturro


Tocan comedias, a excepción de El gran cuaderno, adaptación de la obra de la escritora húngara Ágota Kristóf, ambientada en la Segunda Guerra Mundial, y Divergente, el blockbuster de la semana, que aunque tenga a Kate Winslet parece una versión low cost de Los juegos del hambre, empezando por su protagonista, Shailene Woodley, que no lo hacía nada mal en Los descendientes (2011) pero parece totalmente falta de carisma.

Tenemos comedia española, con Carmina y amén, secuela del debut en la dirección de Paco León, de nuevo protagonizada por su madre y su hermana María. Tenemos comedia mexicana, con No se admiten devoluciones, con Eugenio Derbez, al parecer uno de los cómicos más populares en la patria de Cantinflas. Y tenemos comedia británica, The lunchbox, dirigida a la mediana o tercera edad, de temática india a lo El exitoso Hotel Marigold.

Pero nos quedamos con Aprendiz de gigoló, el nuevo trabajo de John Turturro delante y detrás de las cámaras, en la que se mete a gigoló con un representante de lujo, nada menos que Woody Allen, y secundados por Sharon Stone, Sofía Vergara y Vanessa Paradis. Turturro y Allen, pareja ganadora, y más tan bien acompañados.

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