Último fin de semana previo a los Oscar (esto me pasa por ir siempre con retraso) y tan solo tres estrenos, pero los tres de peso, como si fuesen lo único que quedaba ya por estrenar de prestigio.
Bueno, prestigio precisamente no es lo que busca Es por tu bien, estreno megapublicitado que une a tres pesos pesados del cine español, Javier Cámara, José Coronado y Roberto Álamo, como tres padres que no tragan a sus futuros yernos. Vamos, Los padres de ella en versión cañí y multiplicada por tres.
Casi ha sido el estreno de la semana T2, o sea, la secuela de Trainspotting, que reúne 20 años después al reparto original -Ewan McGreggor, Robert Carlyle, Johnny Lee Miller y Ewen Bremmer, nuevamente bajo la batuta de un Danny Boyle que entonces saltaba al gran público y hoy ya tiene un Oscar en la estantería. ¿Mantendrá la frescura original?
Y me quedo con el estreno oscarizable, Fences (Vallas), proyecto de Denzel Washington, que no solo actúa sino que dirige, con el que buscaba su tercer Oscar. Al final ha tenido que conformarse con la nominación, pero le agradecerá el esfuerzo Viola Davis, cada vez más diva, que se ha llevado el suyo a Actriz Secundaria, como estaba cantado. Washington fue sobre seguro, adaptando una prestigiosa obra teatral por la que tanto él como la Davis ya ganaron el Tony sobre las tablas de Broadway.
Eso sí, años atrás ya hizo lo propio el gran James Earl Jones, así que os dejo con su versión del monólogo más célebre de la obra, sobre un exjugador de béisbol que ahora se gana la vida recogiendo basura y sus difíciles relaciones con su mujer y su hijo. No tiene desperdicio.
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